domingo, 29 de marzo de 2009

No hay fin, ni principio... ¿Y qué?

No hay un final de las cosas; ni tampoco una finalidad.

No hay Mal.

No hay un Plan ni un Argumento que obligue a nadie.

No hay nadie.

No hay principio. No hay Bien. No hay relaciones. No hay pluralidad. No hay dos.

No hay tiempo. No hay movimiento. No hay cambio.

No hay error. No hay pecado. No hay inmoralidad.

No hay sufrimiento. No hay placer. No hay verdad. No hay mentira.

Ninguna de las cosas anteriores existe independientemente, sino sólo en función de alguna de las otras. No hay frío ni calor en términos absolutos: podemos jugar a poner uno en función del otro, y brota un juego. No hay bien ni mal, pero combinados uno en función del otro, surge un juego.

Hay Unidad, pero no hay Unidad. Sí hay Unidad, pero no; son palabras.

Sólo hay lo que hay, pero no lo hay.

¿Acaso hay algún peso que llevar? ¿Y hay alguien para llevarlo? ¿Y qué?

Nada hay. De la nadidad brota todo. fluuuuuuu... fluuuuuuu,,, sin plan,,, fluuuuuuu...

Nada que creer. Nada que crear. Nada que leer. Nada que escuchar. Nada que decir. Nada que mostrar. ¡Nada! Y sin embargo, surge todo... ¿Y qué?

sábado, 28 de marzo de 2009

La relación del Estado con el individuo, por Benjamin R. Tucker

Se trata de una charla realizada por Benjamin Tucker en el Instituto Unitario de Ministros, durante la sesión anual celebrada en Salem, Massachussets, el 14 de octubre de 1890. A causa de la manera clara y concisa en la que el asunto es tratado, merece la atención de cualquier persona interesada en comprender el Anarquismo. ¿Debe el individuo obediencia al Estado?, y, en caso afirmativo, ¿hasta dónde debe llegar esa obediencia?

Si alguien quiere saber más sobre Benjamin R. Tucker, hay una referencia en la Wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/Benjamin_Tucker

Quien lea la charla completa intuirá por qué Joyce calificó a Benjamin Tucker como “la mente más lúcida que nunca ha habido en política”. La charla, aun habiendo sido pronunciada en el lejano año de 1890, no ha perdido vigencia. Selecciono algunos pasajes de la charla que me han parecido interesantes. No obstante no hacen justicia a la charla completa, la cual después del todo no es larga de leer (era una charla de media hora de duración). Cito unos pasajes de la charla:

Buscando, por consiguiente, los elementos comunes a todas aquellas instituciones a las que se les ha aplicado el nombre de "Estado", han encontrado, principalmente, dos: el primero, la agresión; el segundo, la asunción de una autoridad única sobre un área determinada y sobre todos sus habitantes, autoridad ejercida generalmente con el doble propósito de la más completa opresión de sus súbditos y la extensión de sus límites.
(...)

Ahora, ¿qué es la agresión? Agresión es, simplemente, otro nombre para el gobierno. Agresión, invasión, gobierno, son términos intercambiables. La esencia del gobierno es el control, o el esfuerzo por controlar. Quien intenta controlar a otro es un gobernador, un agresor, un invasor; y la naturaleza de tal invasión no cambia si ésta es realizada por un hombre contra otro hombre, a la manera de un delincuente ordinario; por un hombre contra todos los otros hombres, a la manera de un monarca absoluto, o por todos los otros hombres contra un hombre, a la manera de una democracia moderna. Por otro lado, quien se resiste a un intento de control no es un agresor, un invasor o un gobernador sino, simplemente, un defensor, un protector, y la naturaleza de tal resistencia no cambia porque sea ofrecida por un hombre a otro hombre, como ocurre cuando se rechaza el asalto de un delincuente; por un hombre a todos los demás hombres, como ocurre cuando uno se niega a obedecer una ley opresiva, o por todos los hombres contra un hombre, como ocurre cuando los súbditos se levantan contra un déspota o cuando los miembros de una comunidad se unen para refrenar voluntariamente un delito. Esta distinción entre invasión y resistencia, entre gobierno y defensa, es vital. Sin ella no puede existir ninguna filosofía política válida. En base a esta distinción y a las consideraciones apenas bosquejadas anteriormente, los Anarquistas consiguen las definiciones deseadas. Ésta, por consiguiente, es la definición Anarquista de gobierno: el sometimiento de un individuo no invasor, pacífico, a una voluntad externa. Y ésta es la definición Anarquista del Estado: la encarnación del principio de invasión en un individuo o en una banda de individuos, que asumen el papel de representantes o señores sobre todas las personas de un área determinada.
(…)

"Pero", se les preguntará a los Anarquistas al tocar este punto, "¿qué hacer con aquellos individuos que persistan en violar la ley social e invadir a sus vecinos?". Los anarquistas responden que la abolición del Estado irá acompañada del nacimiento de una asociación defensiva, fundada sobre una base voluntaria y no compulsiva, que se dedicará a restringir a los invasores por todos los medios que sean necesarios. "Pero eso es lo que tenemos ahora" es la respuesta. "¿Entonces usted sólo quiere un cambio de nombre?". No tan rápido, por favor. ¿Alguien puede pretender seriamente que el Estado, tal como existe hoy en América, es puramente una institución defensiva? Seguro que no, con excepción de aquellos que ven del Estado tan sólo su manifestación más palpable: el policía en la esquina de la calle. Y no sería necesario mirarlo muy de cerca para captar el error de esta afirmación. Porque el primer acto del Estado, la valoración compulsiva y la recolección de impuestos es, en sí mismo, una agresión, una violación de la igualdad de la libertad y tal acto es el que da inicio a todos los otros, incluyendo aquellos que serían puramente defensivos si sólo pagáramos contribuciones voluntarias a una tesorería. ¿Cómo es posible sancionar, bajo la ley de la igualdad de la libertad, la confiscación de las ganancias de un hombre para pagar una protección que no busca ni desea en modo alguno? Y, si esto es un ultraje, ¿que nombre le daremos a tal confiscación cuando a la víctima se le da, en lugar de pan, una piedra, y, en lugar de protección, opresión? Obligar a un hombre a pagar por la violación de su libertad es, de hecho, añadir el insulto al daño. Pero eso es exactamente lo que el Estado hace todos los días. Lea usted los "Registros del Congreso", siga los procedimientos de las legislaturas estatales, examine nuestros estatutos, someta por separado cada acto legislativo a la ley de la igualdad de la libertad y encontrará que las nueve décimas partes de la legislación existente no tienen por objeto dar fuerza a esa ley social fundamental sino regular los hábitos personales o, peor aún, crear y sostener monopolios comerciales, industriales y financieros que privan al trabajo de la justa recompensa que recibiría en un mercado totalmente libre.

"Ser gobernado", dice Proudhon, "es ser observado, inspeccionado, espiado, dirigido, sometido a la ley, regulado, escriturado, adoctrinado, sermoneado, verificado, estimado, clasificado según tamaño, censurado y ordenado por seres que no poseen los títulos, el conocimiento ni las virtudes apropiadas para ello. Ser gobernado significa, con motivo de cada operación, transacción o movimiento, ser anotado, registrado, contado, tasado, estampillado, medido, numerado, evaluado, autorizado, negado, autorizado, endosado, amonestado, prevenido, reformado, reajustado y corregido. Es, bajo el pretexto de la utilidad pública y en el nombre del interés general, ser puesto bajo contribución, engrillado, esquilado, estafado, monopolizado, desarraigado, agotado, embromado y robado para, a la más ligera resistencia, a la primera palabra de queja, ser reprimido, multado, difamado, fastidiado, puesto bajo precio, abatido, vencido, desarmado, restringido, encarcelado, tiroteado, maltratado, juzgado, condenado, desterrado, sacrificado, vendido, traicionado, y, para colmo de males, ridiculizado, burlado, ultrajado y deshonrado". Estoy seguro de que no necesito señalar a ustedes cuántas de las leyes existentes corresponden y justifican casi cada aspecto de la larga acusación de Proudhon. ¡Cuán irreflexivo es, entonces, señalar que el orden político existente es de un carácter puramente defensivo en lugar del agresivo Estado que los Anarquistas pugnan por abolir!

(…)

Y me parece a mí que eso es lo que pasa con nuestras prisiones. Ellas están llenas de delincuentes que nuestro virtuoso estado ha creado con sus leyes inicuas, sus monopolios destructivos y las horribles condiciones sociales que son su resultado. Nosotros creamos leyes que fabrican criminales y después las utilizamos para castigarlos. (…)
Para leer más textos de Tucker: http://www.banderanegra.canadianwebs.com/pretucker.html

Para quien quiera la charla completa pero en archivo PDF: http://usuarios.lycos.es/anarcoliberales/tucker.pdf

Fuentes o sitios relacionados:

Wikipedia
Libertad individual
Menéame
Charla en PDF

viernes, 20 de marzo de 2009

Megafoto ampliable con zoom

Es una foto curiosa, creo que del día de la investidura de Obama. Haciendo zoom (el zoom con la ruedecilla del ratón es muy cómodo de usar) podemos acercarnos cerquísima de cualquiera, tanto a Obama, Bush, más allá de la farola Powel, etc, como de los miles de anónimos asistentes, hasta el punto de casi poderles ver las ojeras o casi leer las partituras de los músicos. Me ha parecido interesante, así que dejo aquí el link: http://gigapan.org/viewGigapanFullscreen.php?auth=033ef14483ee899496648c2b4b06233c

viernes, 13 de marzo de 2009

Drunvalo Melchizedek en Argentina

El 2 de Agosto de 2008 Drunvalo estuvo en Argentina. El vídeo de la charla dura 34 minutos (no es en español pero sí está subtitulado en español). Para verlo en el sitio donde lo encontré, ir a Google Video. También puede verse aquí debajo:




Para mayor comodidad, no olvidéis que uno de los botones en la parte de abajo del vídeo permite verlo a "pantalla completa".

jueves, 12 de marzo de 2009

¿Gotas de agua en Marte? Los científicos están divididos

El pasado mes, se anunció que pocos días después del aterrizaje de la sonda marciana Phoenix en mayo del 2008, la cámara acoplada al brazo robótico obtuvo una prueba visual de lo que parecían ser gotitas de agua condensadas en una pata de la sonda. En tres imágenes tomadas en sol 8, Sol 31 y Sol 44 (Sol es un día marciano, Sol 10 por ejemplo, se refiere al décimo día marciano de la misión) , las gotitas parecen moverse de la misma manera que un fluido. Aunque un reciente análisis indica que esta rareza podría deberse a la presencia de una mezcla de agua y perclorato (las sales actuarían como un potente anticongelante, evitando que el agua se congele y se sublime), otros miembros del equipo de Phoenix se muestran escépticos, razonando que existen explicaciones más probables.

Para leer el resto y ver las fotos, ir a la página de donde he copiado la anterior introducción: aquí.